Muchas personas creen que cuando pierden un trabajo es el fin del mundo pero, la realidad es que es el comienzo de una nueva etapa a la cual Dios te está introduciendo. Recuerdo hace unos años cuando una persona a la cual estimo mucho perdió su trabajo; en ese momento todos pensamos ¿y ahora qué? , como vas a pagar tus compromisos? como vas a salir adelante? pero él lo vio como un nuevo comienzo y hoy en día es un contratista en el área de construcción el cual gana cinco veces más de lo que antes obtenía trabajando en ese lugar en el cual estaba.
Y sabemos que a los que aman a Dios, todas las cosas les ayudan a bien, esto es, a los que conforme a su propósito son llamados. Romanos 8:28
Haber perdido un trabajo no tipifica que es el final de tu vida sino más bien el comienzo de un nuevo nivel al cual Dios quiere llevarte pero, todo depende de la forma en que mires la situación que estás viviendo.
David en el momento que vio a aquel gigante no lo vio como tal; sino como un simple hombre al cual Dios vencería a través de él; cuando el clamo a Dios para que lo socorriera su mirada no se quedaba en los Montes sino en aquel que creo los montes; has estado viendo tu situación con tus ojos naturales? o con los ojos de la fe?; déjame decirte que si Dios te cerró la puerta en ese lugar en el cual estabas es porque ya no te quería allí y como era imposible que salieras de allí por ti mismo porque estabas tan aferrado a ello simplemente ocurrió una situación la cual dio como resultado que perdieras tu trabajo.
A cuantas personas Dios les ha tenido que privar de privilegios únicamente porque sus corazones se han envuelto en lo que él les dio y se olvidaron de que fue Dios quien los promovió a los lugares en los cuales estaban. Si perdiste tu trabajo es el tiempo más oportuno para que cultives tu vida espiritual, para que hagas la Obra del Reino, gana almas, predica la palabra, ve a los hospitales, visita a los huérfanos; mucha gente en este tiempo han perdido sus trabajos y en vez de ponerse a hacer la Obra de Dios pasan todo el día lamentándose por lo que les sucedió o diciéndole a los demás ¿PORQUE A MI? , cuando en realidad debieras pararte firme y ocuparte de los negocios de Dios para que él se ocupe de los tuyos.
Hace no mucho tiempo una persona cercana a mi perdió un trabajo bien importante pero nos dejo una tremenda lección y es que no se deprimió y mucho menos se desalentó , antes bien , todo este tiempo desde que perdió su trabajo ha profundizado en su relación con Dios y se ha ocupado de cosas a las cuales antes no les dedicaba tiempo por causa de ese trabajo.
No creas que en vano perdiste aquella posición; si Dios así lo permitió simplemente todo esto que estás viviendo te va ayudar para bien porque fuiste llamado conforme a un propósito que Dios te trazo por delante, y tal vez Dios te tuvo que sacar de donde estabas porque ese lugar era un tropiezo para que su plan ya establecido se cumpliera en ti. Por eso no te puedes dar por vencido, no puedes creer que todo está perdido, es tiempo de levantar la mirada y reconocer que fuiste llamado con un propósito el cual Dios te estableció desde antes que nacieses.
Si habías estado desanimado, deprimido y postrado en el piso por haber perdido tu trabajo que tal si oramos a Dios para que el derrame fuerzas nuevas sobre ti y te levantes de donde estas en el Nombre de Jesús. Padre Nuestro que estás en los cielos en este momento me rindo a ti y gracias te doy porque a los que te amamos todas las cosas nos ayudan a bien a los que fuimos llamados conforme a tu propósito; gracias porque en este momento tu me levantas y me das la fuerza para seguir adelante e introducirme a una nueva etapa de mi vida, en el Nombre Poderoso de Jesús, amén.
Por Guía del Espíritu Santo
Carlos y Chantalle Villarreal
Pastores y Evangelista, Miami FL, USA.
Carlos y Chantalle Villarreal
Pastores y Evangelista, Miami FL, USA.
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